No era cuestión de ver
Antes pensaba que es porque no veía una mierda. Y seguramente parte de razón tenía, ya que solo veia una silueta difusa saludar en la distancia, pero ahora que siempre voy con lentillas he descubierto que no, que por más excusas que ponga la verdad no va a cambiar, y es que mi memoria es una auténtica mierda. De hecho, para las cosas que no me interesan mucho es nula, y no es broma. Para que lo entendáis, se me dan tan mal las mates, porque cada año tengo que empezar de cero. Bueno, de cero no, porque sumar y restar sé, pero dividir ya no.
Con todo esto lo único que quiero decir es que si algún día me saludas y luego no lo recuerdo, es que simplemente devuelvo los saludos como si se tratara de un contestador automático. Lo siento, soy así.